En los momentos de crisis familiares (fallecimientos, divorcios etc…) realizamos una labor de asistencia inmediata, para pasar luego a los necesarios contactos previos con la contraparte que conduzcan a un mutuo acuerdo judicial o extrajudicial, ofreciendo, en el caso de graves desavenencias, una sólida y eficaz defensa del cliente en el litigio ante el Juzgado.

Tendrá garantizada desde la primera consulta una defensa especializada de su problema con la herencia familiar, llevando a cabo no sólo las gestiones previas sino también defendiendo su postura, caso de discrepancia entre los herederos, en la testamentaria ante el Juez competente. Su divorcio, tanto en el aspecto personal de custodia de los hijos, visitas y vacaciones, como en la parte económica -pensiones de sus hijos y excónyuge, reparto y liquidación de los bienes comunes- siempre será atendido con la defensa jurídica personalizada que merece.